domingo, 9 de septiembre de 2007

SERVIR CON ALEGRIA

Empezaré por contarles que durante los meses de junio y julio, la Comunidad Cristiana Shalom, estuvo capacitándonos sobre el privilegio de servir, y donde sábado tras sábado recibimos principios sobre el mismo, y al final culminamos con un proyecto para aplicar lo aprendido durante estos meses. Fue impactante escuchar los comentarios positivos sobre el desarrollo de todos los proyectos a nivel de nuestra Comunidad, estoy segura, que la sociedad Ibaguereña sintió el amor de Dios en cada uno de ellos, me imagino cada proyecto, como los brazos del Señor extendidos abrazando y expresando amor a cada persona donde tuvimos la oportunidad de ir.

Para nuestro caso, la Supervisora del Sector II, Marlene Orjuela Ramírez, nos sugirió que realizáramos el proyecto en la Casa del Menor de la Calle, por lo que nos dimos a la tarea de hacer los arreglos necesarios con el Grupo Familiar II-05 para sacar adelante este proyecto que consistía en darles un desayuno, llevarles alguna prendas de vestir, compartir la Palabra del Señor, tener un tiempo de alabanza y juegos con los niños.

Lo primero que pudimos confrontar, al estar en este lugar, fueron las Palabras del Señor Jesús cuando dice: más bien aventurado es dar que recibir, y no se equivoca, pues esto fue lo que sentimos al realizar nuestro proyecto de servicio, con los niños de la Casa del Menor de la Calle, habían el sábado 3 de agosto/2007, 24 chicos de edades entre 8 y 16 años. Hubiéramos querido pasar mucho tiempo allí, pero bastaron tres (3) horas para sensibilizarnos y motivarnos a continuar apoyando este tipo de obra, me di cuenta que el Señor nos manda a ir a las personas, no que nos quedemos encerrados mirándonos las caras y a conformarnos con la situación.

Realmente disfrutamos haciendo ese desayuno, compartiendo la palabra, orando, alabando al Señor.

Quiero expresar mi mas sinceros agradecimiento a Felipe Carrillo Orjuela y Manuel Celemín, dos jóvenes que nos apoyaron en la alabanza, a Sara de Guarín, persona que nos hizo el contacto en esta Institución, a Myriam Lis, Myriam Oñate, Gloria Astrid Barreto, Jesús Medrano y cada uno de los miembros del grupo II- 05, al igual que Lina Maria Patiño Tovar, jovencita que con su hermosa sonrisa y sencillez estuvo allí también apoyando, igualmente todos aquellos que pusieron su granito de arena, como mis compañeras de trabajo Amalia Dávila Franco y Maria Dolly Sotelo Bejarano, a Janeth de la empresa Autopanes Marrero, personas que con su entusiasmo y con su amor hicieron posible la realización de este proyecto, gracias, gracias por su aporte, fue muy significativo, Dios les continúe bendiciendo. También quiero agradecer a aquellos que no pudieron estar allí pero que apoyaron económicamente, gracias, también porque sin su ayuda hubiera sido difícil llevar a cabo esta linda obra.

La Palabra del Señor dice: Dejad a los niños venir a mi, y no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de los cielos Mateo 19: 14. Aquí vemos lo importante que son los niños para el Señor, y la expresión “no se lo impidáis”, tiene que ver con todas aquellas cosas que hacemos para alejarlos de la fe, por ejemplo, algo tan sencillo como nuestro comportamiento, lo que decimos o hacemos, puede hacer que los niños no se acerquen al Dios de amor, al Dios que todo lo puede en todo tiempo, y entonces hace que vivamos esta realidad que palpamos en este lugar. Tal vez fue el comportamiento de un papá y una mamá, que ignoraron a su hijito, mientras discutían, y esta escena se repetía vez tras vez, hasta llegar el momento de no aguantar más, y entonces encontraron en la calle el antídoto a sus problemas, muy grandes para ellos tan pequeños.

No seamos ciegos, sordos y mudos ante realidades como estas, que nos rodean todos los días. Cuando veas un niño en la calle, no le des plata, tal vez lo que ese niño necesita es una expresión de amor, bendícelo, ora a Dios por él y si te es posible, abrázalo, es fácil hacerlo con aquellos que están bien vestidos y huelen a un rico perfume, pero lo podremos hacer con aquellos que tienen sus vestidos raídos por sol y el agua que han recibido?, y que su único perfume, es el olor al sudor acumulado, tal… vez … esto…. nos cause repugnancia, y un arrugar nuestro entreseño, pero recuerdo esas palabras de Jesús cuando en el juicio de las naciones dice: …”Entonces el Rey dirá a los de su derecha: Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo. Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de ver, fui forastero, y me recogisteis; estuve desnudo, y me cubristeis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a mí. Entonces los justos le responderán diciendo: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, y te sustentamos, o sediento, y te dimos de beber? ¿Y cuándo te vimos forastero, y te recogimos, o desnudo, y te cubrimos? ¿O cuándo te vimos enfermo, o en la cárcel y vinimos a ti? Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo que en cuanto lo hiciste a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mi lo hiciste” Mateo 25: 34 – 40, tremendo verdad?, así que no seamos insensibles, y actuemos, hay mucho por hacer, y cuando sientas las ganas de quejarte por cosas tan baladíes como por ejemplo, una comida que te sirvieron y que no es de tu agrado, recuerda esto sería un manjar para aquellos pequeños, o aquel traje que con amor te compraron tus padres, pero no es tu estilo, para ellos, es lo máximo.

Por último quiero invitarte a hacer parte de este proyecto, esto es el inicio, pero Dios es el que sabe cual es el final, nosotros soñamos con hacer grandes cosas, pero Dios tiene la última palabra, nosotros queremos poner nuestra disposición y lo que tenemos, pero Dios es el que nos da la fuerza y los recursos, DEJEMONOS USAR POR EL Y VEREMOS GRANDES COSAS.